

Según el tipo de superficie:
• Anillada: Provista de anillos o resaltos anulares.
• Cocleada: Con surcos poco profundos a manera de petroglifo o caracol.
• Equinada: Con espinas o aguijones cortos y gruesos.
• Escamosa: Se divide en piezas semejantes a tejas, grandes o pequeñas.
• Espinosa: Con espinas largas, endurecidas y puntiagudas.
• Estriada: Con rayas longitudinales.
• Fisurada: Con surcos y costillas longitudinales.
• Foveolada: Con marcas en forma de pequeños hoyos.
• Lisa: Sin ninguna aspereza.
• Muricada: Cubierta por estructuras más o menos cilíndricas, cortas y duras. Rugosa:
Con pliegues o arrugas irregulares.
• Tuberculada: Cubierta por pequeños tubérculos.
• Verrugosa: Cubierta de protuberancias a manera de verrugas.
Según el tipo de consistencia o textura:
• Coriácea: Con la consistencia del cuero.
• Escariosa: Membranosa y seca.
• Leñosa: Con la consistencia dura y gruesa como la madera.
• Papirácea: Delgada con la consistencia del papel.
Según el tipo de consistencia o textura:
• Suberosa: Con la textura del corcho.
• Suculenta: Carnosa y gruesa.
Según la presencia, cantidad y distribución de lenticelas:
• Agregada: Formando grupos en el área de la corteza.
• Aleatoria: Con una distribución asimétrica en el área de la corteza.
• Escasa: Con menos de 1 lenticela por cm².
• Lenticelada: Con lenticelas visibles a simple vista.
• Masiva: Con más de 2 lenticelas por cm².
• No lenticelada: Sin lenticelas visibles a simple vista.
• Regular: Con una distribución uniforme en el área de la corteza.
Según su coloración:
• Intensidad de color: Clara, oscura.
• Color: Anaranjada, blancuzca, grisácea, negruzca, parduzca, rojiza, verde, otros.